La fruta, la mano (1996-1997)
Nos hallamos ahora ante mi tercera obra, que es la segunda de la tetralogía anteriormente mencionada. Fue publicada, en edición de 1000 ejemplares, de los que aún hay existencias, en el 2003 por la Editorial Alhulia, Colección "Poesía, S.A.", nº 2, Granada, 2003. En esta obra presento una disyuntiva entre la fruta, como símbolo de todo lo gozoso y apetecible de la vida, y la mano, que rehúsa tomar esos dulces ofrecimientos, porque está concentrada en el ejercicio absorbente de la creación poética. Aquí el lenguaje se adelgaza y se torna bastante más sencillo y directo, respecto de la propuesta estilística que hice en El cuerpo del delito. Ningún poema lleva título y van contrastándose entre ellos para dar respuesta a esa disyuntiva que desde el propio título planteo.
Hay cuerpos tan hermosos que en un beso se agostan
y hermosas latitudes que no saben de mapas.
Hay cráteres de barro y géiseres de hielo
y horribles meridianos al norte del hastío.
*
Hay frutas que exprimidas se secan en sus jugos
y manos que si vuelan son nubes o ciclones.
Hay edenes e infiernos en el jardín del agua
y una boca que bebe en los labios del asco.
*
Los desiertos se nutren de las dunas que arden.
En mi pecho un glaciar mira al sol y florece.
***
La mano que tardía llega al fruto temprano
o sólo lo acaricia y lo deja en su rama
para no mancillar su jugosa frescura
o lo arranca de cuajo y mordido lo tira
o entero lo devora y con él se envenena.
*
Alabo yo la mano que toca con los ojos
e intactamente besa el fruto inalcanzable,
para después, a solas, su pulpa y su turgencia
destilar en palabra que el olvido marchite.
*
Pues acaso esa mano que tardía parece
siembra nuevas semillas de más íntimos frutos,
aunque con sangre riegue y silencios y lágrimas
y coseche, baldíos, los amargos vocablos.
10 comentarios
ruben -
r -
lolita -
Juan de Portugal -
Fran -
Carlos -
Raul -
pepa la de portugal -
Clara -
jose alberto -